Mi arreglo de novia
Ni dolor de cabeza, ni ansiedad, ni nervios en exceso; empecé el día de mi boda con mucha tranquilidad y por supuesto, con una inmensa felicidad. Hoy te quiero compartir cómo viví las horas de mi arreglo de novia, para que sueñes cómo quieres sentirte en ese momento y lo planees a la perfección.
La mañana del sábado fue de mucha calma para mí. Marce Villaseñor me inspiró tanta confianza con su equipo de Bodas Huatulco que no di seguimiento a nada; tenía la seguridad de que todo estaba marchando perfectamente (por supuesto, no me equivoqué). Fui a desayunar sin prisas (sola, porque mi novio necesitaba nadar al amanecer). Regresé a mi habitación en un ambiente ordenado, hice unos minutos de meditación, me convencí a mi misma de que iba a aceptar cada cosa como llegara e iba dejar que todo fluyera de manera armónica. Para terminar de relajarme cerré mis ojos por un unos minutos mientras escuchaba un playlist acústico que había descargado de Spotyfy. Sí, así de bien se inicia cuando delegas la organización y tienes una espléndida coordinadora de boda.
Poco después llegó Marce con el equipo de Ikal Noil Hair Studio y comenzamos con el momento de belleza. Pasó mi mamá, luego se fue a su habitación guapísima, desde ahí iba a estar atenta junto con mi papá a lo que yo pudiera necesitar; se fue porque ninguna de las dos sabíamos bien cómo funcionaba el arreglo de novia en un hotel. Tocó el turno de mi suegra...pasaron cinco minutos, luego diez, luego quince... y ella no aparecía. Después de cuarenta minutos llegó disculpándose porque se había quedado dormida. ¿Qué hice en todo ese tiempo? Platicar con Marce. Estoy segura de que ella sabía que era un momento crítico y que si me dejaba me podría angustiar. Nadie se esperaba ese retraso. Se portó como una gran amiga y le estaré eternamente agradecida por haberme acompañado y además hacerlo de manera muy amena. Platicamos muchísimo. Después fue mi turno, comenzó el peinado y maquillaje. Mis amigas me enviaban mensajes de que se estaban preparando, pero no había nadie para acompañarme. Sombra aquí y sombra allá. Terminamos. Mis hermanas aparecieron al final de ese parte, felices porque habían estado en el mar. Llamamos a mi mamá quien me ayudó a vestirme y llegaron mis amigas. Risas, muchas risas. Un poquito de nervios, pero muy emocionada de seguir con todo lo que nos esperaba en ese hermoso día.
No se si te has dado cuenta, pero durante mi arreglo de novia estuve sola. No lo tenía planeado así, pero así sucedió; el mar hizo una competencia importante y las horas eran escasas, así que todos mis invitados hicieron lo posible para disfrutar de la playa. Pero todo pasó tan rápido que no tuve ni tiempo de sentirme mal y me alegré mucho cuando estabamos rumbo al lugar de la ceremonia con todos mis seres queridos. Te recomiendo te visualices en ese momento y comuniques muy bien de quien quiénes quieres estar acompañada.
Y aunque por ahora todo esté en pausa, mucho ánimo, recuerda que esto es temporal.
Nicole San Juan
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